El ritmo circadiano es un proceso biológico que regula la alteración del sueño, este sistema está controlado principalmente por la luz.
El ritmo circadiano humano es de aproximadamente 24 horas, y para mantenerlo sin interrupciones, es importante que se mantenga el equilibro entre la luz y la oscuridad, para dormir correctamente. Un ritmo circadiano perturbado afecta tanto al malestar como a la recuperación del paciente. Por este motivo se debe tener en cuenta el buen diseño de la iluminación en espacios sanitarios.
La iluminación en la habitación de un paciente es muy compleja, ya que se deben tener en cuenta tanto las necesidades del paciente como las del personal sanitario. Independientemente de la hora del día y por lo tanto del nivel de luz solar, el paciente necesita un ambiente tranquilo y sin estrés, un lugar donde se sienta seguro y que promueva la curación y el bienestar. En cambio, el personal sanitario necesita la suficiente luz de trabajo para poder examinar y tratar al paciente, así como administrar medicamentos y tomar notas.
Las salas de Cuidados Intensivos pueden volverse demasiado técnicas y aterradoras para el paciente, pero los profesionales sanitarios necesitan luz para poder atenderles. La solución se encuentra en una adecuada iluminación que satisfaga las necesidades de todos. Una sala de Cuidados Intensivos es ante todo un espacio de atención, está diseñada con un buen acceso a instalaciones técnicas médicas y una buena luz de trabajo para los profesionales.
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