La justicia europea sienta jurisprudencia sobre el uso de fotografías de terceros en internet.
El hecho de que la publicación de una fotografía se encuentre autorizada para su libre acceso (visualización y descarga) por parte de su autor en determinado sitio web no significa que cualquiera pueda publicarla en otro sitio web sin pedir una nueva autorización.
Así lo ha decidido el pasado mes de agosto el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) en un caso que enfrentaba a un autor alemán, Dick Renckhoff, que había concedido permiso para la publicación de una de sus fotografías en una web de viajes, con un colegio de Westfalia (Alemania), que decidió publicar en su página web corporativa el trabajo escolar de una alumna de secundaria que ilustró su proyecto con una de las fotografías publicadas del citado autor.
Para resolver este asunto, el Tribunal analiza si los usuarios de internet deben obtener el permiso del titular de los derechos sobre la fotografía para su re-publicación en otra página web incluso si la misma ya se encuentra en “acceso libre”, es decir, no sujeta a restricciones de descarga, o si dicha libre accesibilidad implica su “uso libre”.
En este sentido, el Tribunal expone que usar una fotografía en internet sujeta a derechos de autor para publicarla en otro sitio web sin la autorización de su creador, supone una violación de sus derechos de autor.
Argumenta el TJUE que dicha publicación debe calificarse de puesta a disposición de esa obra a un público nuevo, es decir, a un público que no fue tenido en cuenta por el titular de los derechos cuando autorizó la comunicación inicial y, por lo tanto, entenderse comprendida dentro de los derechos de explotación de titularidad exclusiva de su autor. Y ello, añade, sin que tenga relevancia alguna su “libre acceso”, es decir, el hecho de que el titular de los derechos de autor no haya limitado a los internautas las posibilidades de uso de la fotografía.
Tras esta sentencia el TJUE deja claro que publicar en internet no es sinónimo de renuncia a los derechos de autor y, en cierto modo, blinda los derechos sobre las fotografías cuando son usadas en un sitio web sin la autorización de su autor rompiendo, una vez más y en línea con la jurisprudencia precedente, con la creencia de que todo lo que está accesible a través de internet está libremente disponible para su uso.